Descubro tus manos húmedas
resbalándose sobre mi herida piel
y lentamente se rebosan
las lágrimas insatisfechas de mis poros
y con un maleficio de hadas
envenenan mis inquietudes
que buscan el eco de tu voz.

Percibo tus manos en mi cuerpo
y vibró al paso de ellas
y me excita la idea de disfrutarte
aspirando el sabor de mis senos.

De repente como volcán en erupción
explota el delirio de mis manos
en buscar los ardores escondidos
de tu cuerpo,
y como una loca encontrar y
rasgar el premio que me espera
sabiendo que hallaré
el estallido de mis batallas
feroces hasta triunfar,
para conseguirlo por ti;
y poder saciar mis instintos
para así descansar mi cuerpo
de tantos deseos por poseerte.

Consigo de nuevo tus manos suaves
y las percibo excitando
las estancias húmedas
de mi cuerpo,
que arden nuevamente
al paso de tus manos
como aleteos de mariposas
al ritmo de sus alas
y al sentir y querer
rompo como loca los lazos
y corro hasta tus brazos
para buscar mi expiración final…

Pero al recorrer mi habitación
descubro que estoy sola,
y que fueron mi corazón y mi alma
que se desprendieron de mi cuerpo
para atravesar la distancia
del mar que nos separa
para encontrarse con tu cuerpo…

De repente entre tanta calma y armonía escuché unos sollozos, me sobresalte y me escondí
detrás de la estrella, pero mi curiosidad era mayor a mi temor, y observe que con asombro
que eras tú quien estaba llorando en tu alcoba en tinieblas, suspirabas y gemías de soledad,
te levantaste al sentir el destello de mi estrella, me escondí de nuevo temiendo me descubrieras, te quedaste observando la estrella con atención como si adivinaras que estaba
oculta detrás de ella, luego volteaste de nuevo y continuaste llorando pero ahora con más dolor, caminaste por la oscuridad y de nuevo la estrella ahora alumbró con más fuerza y pudiste divisar que donde los rayos llegaban había en el suelo una hermosa rosa, era la misma que en una oportunidad te regalé como regalo por amarme tanto, la miraste detenidamente y al fijarte en el centro de sus pétalos… ahí estaba yo…

Así como mi cuerpo tiene un corazón
que sustenta la sangre que corre por mis venas,
dentro de mi corazón estas guardado tú,
el único que entiende mis porque y reconfronta
mi ser como el gozo que arraiga mi alma
cada vez que miro el ocaso.
Un sentimiento vale más que mil palabras
y esto que llevo por dentro es más fuerte que mi cordura,
estas allí para hacerme olvidar lo amargo
que puede tornarse la vida y recordarme lo grande
que es sentirse querida y viva.

Seguramente desde que nací supe que te iba a conocer
y me negué a mi mismo el sufrimiento que se apodera de mi
el hecho de saber que en un rincón de la tierra aún existe un amor
sin fronteras, sin límites, porque en el se cobija la ilusión,
el apoyo y el respeto de los sentimientos del otro, quien decidió
tener deseos de pasión con alguien a quien ama de verdad,
donde encontró la felicidad que no hallo en la cercanía
que nos unió en un lapso de nuestras vidas…

El amor es tan delicado y susceptible como un hermoso rosal
que nos brinda placer ante los ojos y tentaciones al inconciente,
no sabes si arrancarlo o dejarlo vivir para que muera en la realidad,
que luego se va y nos deja un grato recuerdo.

Siento que te conozco hace tiempo,
de otro milenio,
dime se me recuerdas.

Sabía que existías, lo presentía,
fue el destino y sin saberlo te encontré,
no me preguntes como sucedió,
ni yo misma lo sé, solo que pasó.

Nací para ti,
soy como un cofre cerrado
que solo tu tienes la llave para descubrir
lo que hay dentro de el.

Aunque me cuesta expresar lo que siento,
aflora mis sentimientos
como un volcán que ha estado inactivo
por millones de años y
de repente hace erupción
sin avisar a nada ni a nadie.

Como sabré si vendrás a mis brazos y
sentir tu calor si estas tan lejos
y a la vez tan cerca aquí dentro de mi corazón,
dominas mis emociones provocando en mi una odisea
de fugas que se desvanece en un mar impetuoso.

Cuanto desearía tenerte cerca y poder descubrir
la dulzura de tus labios
que ahora me niegas por lo distante
de nuestras vidas.
Sin embargo en mis noches de silencio,
sin tenerte puedo sentir el calor
de tu cuerpo y el sabor de tus besos.

Yo no soy la dueña de la pasión de hielo
soy la que siente, la que ama,
vivo solo el presente para mi no existe
ni el pasado ni el futuro,
solo soy la que sabe que siente,
le doy valor al presente
porque estoy contigo y tu conmigo
y solo sé que mi amor existe hoy,
no se si mañana.

Eres verso de mi inspiración
donde llevas mi amor grabado,
lacrado en el pecho,
la cobardía ya no existe en mí,
ahora tengo valentía
para luchar por tu amor,
por nuestro amor
porque soy la que te merezco,
antes me dormía en la soledad
y mi deseo era que me correspondieras,
solo anhelaba que me amaras.

Tus brazos son mi cárcel,
cárcel de la que no quiero escapar,
mi alma se siente dulcemente atrapada
por tu suave amor y mi único deseo
es ser amada por siempre.

Mi voluntad es una enfermedad
que no desea ser aliviada,
porque si tu eres mi dolor
moriría feliz en tus apacibles brazos,
si es así, que venga la muerte
será bienvenida.

Mi egoísmo es tan grande
que solo deseo que seas mío,
no quiero compartirte
con nadie más, codicio poseerte
las 24 horas del día y aun inventaría
horas para permanecer en tus brazos.